Joséphine Baker, una gran artista del music-hall durante la década de 1920, estuvo viviendo en la villa Beau Chêne, una enorme villa de finales de siglo, rodeada por un espléndido parque inglés, que los actuales propietarios apenas han modificado.
De hecho, esta gran bailarina y gran altruista a la vez se involucró mucho en ayudar a niños y refugiados. Acudía con regularidad al antiguo orfanato, ahora conocido como la Maison Saint-Charles, para organizar un centro de gestión de refugiados en la Estación de París Norte durante la Segunda Guerra Mundial.
Su villa, donde vivía rodeada de animales, como monos y leopardos, también era un lugar de recepción muy apreciado. La última recepción que organizó fue en honor al sultán de Marruecos, Mohamed V, en 1945.
El arquitecto Vésigondin Louis Gibert fue el encargado de construir la villa Beau Chêne entre 1890 y 1891. Josephine Baker vivió allí desde 1927 hasta 1947. Luego pasó a pertenecer a varios propietarios privados.
Se organizan visitas guiadas comentadas en esta suntuosa villa con ocasión de las Jornadas Europeas del Patrimonio.
Su villa, donde vivía rodeada de animales, como monos y leopardos, también era un lugar de recepción muy apreciado. La última recepción que organizó fue en honor al sultán de Marruecos, Mohamed V, en 1945.
El arquitecto Vésigondin Louis Gibert fue el encargado de construir la villa Beau Chêne entre 1890 y 1891. Josephine Baker vivió allí desde 1927 hasta 1947. Luego pasó a pertenecer a varios propietarios privados.
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